UNICEF: Visita a Etiopía
Este es un recuento de la visita de Priyanka a niños refugiados que huyen de conflictos y crisis humanitarias en Ethiopia, en la campaña #AChildIsAChild (Un niño es un niño) de UNICEF
DÍA 1
Mi primera visita fue a la escuela primaria Sibiste Negasi en Addis Abeba. En Etiopía, la inscripción en la escuela primaria entre 2000 y 2017 se ha TRIPLICADO. Esto se debe a la inversión del gobierno etíope en educación y su dedicación al futuro del país ... pero todavía hay mucho trabajo por hacer. 2.6 Millones de niños en edad escolar primaria y secundaria están fuera de la escuela, y el 50% de los niños que van a la escuela abandonan sus estudios antes del 8º grado. Debido a la pobreza, los niños son responsables de mucho más que solo aprender, como cuidar a los hermanos, caminar millas para recoger agua y otras tareas domésticas ... cosas que no deben ser responsabilidad de un niño a cualquier edad. Un niño es un niño. Los esfuerzos de Unicef, junto con un gobierno muy comprometido, se centran en conseguir que todos los niños asistan a la escuela, garantizando que cada niño tenga una educación de calidad y que todos los niños terminen la escuela. Gracias, Director Abebech, Dagmawit (7º grado) y a todos los demás estudiantes que hicieron que mi primer día en Etopía fuera tan especial.
Dagmawit y sus amigas son miembros destacados del Club de Género, un programa complementario de Unicef que permite a los niños y niñas crear clubes para compartir conocimientos y habilidades a otros estudiantes para ayudarlos contra las prácticas sociales nocivas, la violencia de género, el matrimonio infantil y la violencia sexual. Fue sorprendente ver a estas valientes chicas asumir y hacerle frente a temas tan difíciles. Creando un entorno en el que pueden enseñar a sus propios compañeros. Estoy inspirada.
"Absolutamente, nada mejor que abrazos de los niños." - @PriyankaChopra
Esta tarde tuve el honor de conocer a la señora Presidenta, Sahle-Work Zewde, la primera mujer presidenta de Etiopía. Su feroz compromiso para el empoderamiento y el avance de las mujeres no tiene precedentes. Ella también tiene una perspectiva global para el desarrollo de su país: Etiopía es el segundo país recibidor de refugiados más grande de África, ya que han ingresado poco menos de 1Millon. Ella está presionando por nuevas políticas que brinden a las personas acceso a la educación y otras necesidades esenciales para mejorar su situación económica familiar y, por ende, la economía de Etiopía.
La danza es una parte muy importante en la cultura etíope. Donde sea que he estado hasta ahora ... aunque no hablemos el idioma del otro... la alegría que hemos compartido a través del baile me ha unido a este increíble país para siempre. (Aunque soy terrible en eso🤦🏽♀️😂) Etiopía es extremadamente rica en cultura y compasión.
DÍA 2
En la Escuela Primaria del Campamento de Refugiados de Bambasi hay escasez de maestros capacitados, cuentan con un maestro por cada 89 estudiantes. Esta clase de segundo grado es impartida por Hubahiro, es una niña refugiada que cursa el octavo grado en la escuela. Ella enseña los grados 1-4 por la mañana y por la tarde asiste a la escuela para continuar con su educación. Al igual que su madre, que también es refugiada y maestra en la escuela, ella gana una pequeña remuneración. Cuando conocí a los niños, eran muy introvertidos y tímidos. Me tomó muchas cosquillas y mimos para que interactuaran conmigo. Gracias Hubahiro por traducir y ayudar a los niños a entender que yo era una amiga.
Ella es Hasina (15 años), es una estudiante de séptimo grado que ama ir a la escuela. Solía vivir con su hermana y su esposo, y sin que ella lo supiera, el esposo de sus hermanas estaba arreglando su matrimonio con uno de sus amigos, ella tenía 12 años en ese momento. Un día, cuando el hombre visitó su casa para molestar a sus padres para que se casaran con ella, ella escapó a la casa de una amiga y al día siguiente fue a una de las plataformas de prevención del matrimonio infantil (sola) de la comunidad, de la que había oído hablar en la escuela. Se preguntó a sí misma, que si se casaba ahora, ¿volvería algún día a la escuela? A Hasina le encanta aprender y no estaba dispuesta a cambiar su educación o su libertad por nada. Eso le dio el valor para defenderse por sí misma. La comunidad, junto con las autoridades, intervinieron y se detuvo el matrimonio. El hombre fue acusado. Es importante entender que se necesita una gran cantidad de coraje para ir en contra de estas "normas" culturales que han existido durante siglos. Hasina es una chica muy valiente. Fue muy alentador ver a los ancianos de la comunidad aprender del ejemplo de esta niña que le ha puesto el pie, en contra del matrimonio infantil y la mutilación (corte de genitales femeninos). La educación les dio a estas chicas esa nueva perspectiva. Esta comunidad es un ejemplo de cómo el cambio si es posible. LOS DERECHOS FEMENINOS SON LOS DERECHOS HUMANOS.
Abda Abdulaziz, de 26 años, llegó al campamento de Bambasi en 2011 buscando refugio de la guerra en Sudán. Sus 5 hijos nacieron en este campamento y están siendo criados aquí, mientras que su esposo trabaja como obrero en una granja cercana; se ven cada dos semanas durante unos días. Ella dijo que si la violencia en su país cesa, ella y su esposo pueden considerar regresar, pero no tiene muchas esperanzas de que eso suceda. Mientras tanto, la vida en el campamento permite que sus hijos tengan acceso a una educación. Conocí a dos de sus hijas, Zulfa Ata Ey, 8, y Muzalefa, 10, en la escuela primaria que había visitado ese día. Zulfa está en los primeros puestos de su clase y su madre está muy orgullosa. Aunque están a salvo y sus hijos reciben una educación, todavía viven por debajo del umbral de la pobreza, y ella está desesperada por los suministros más básicos ... como agua, libros y ropa para sus hijos.
PSDT: El último vídeo fue grabado por Zulfa cuando jugaba con mi teléfono.
DÍA 3
Awetash, 6 meses, ha estado en el Centro de Estabilización desde que tenía 2 meses de edad; pesaba 2.2 KG (4.4 Lbs.) Su madre, Alamauou, de 28 años, dio a luz prematuramente a su bebé debido a su propia desnutrición, y como resultado, es incapaz de producir leche materna. Los ojos de Awetash mirándome me hicieron un agujero en la mente. (Su pierna, a los 6 meses de edad, cabe en mi mano) El pensamiento de cualquier niño en el mundo que se muere de hambre es verdaderamente contra la naturaleza. Pero como en el centro de salud la están vigilando y alimentando constantemente, está progresando mucho y está comiendo alimentos terapéuticos altamente nutritivos para ganar peso y energía.
Selam Haile, de 30 años, visita todas las semanas el Centro de Evaluación de Nutrición en el campamento de refugiados de Tselemti woreda con su hija Rahwat Afewerki, durante 10 meses. Cuando comenzó a visitar el Centro, Rahwat tenía 6 meses y estaba desnutrida, pero en los últimos 4 meses su salud y su peso mejoraron significativamente. Estas son solo algunas de las historias de éxito de cómo estos centros de salud y nutrición ayudan a los niños a obtener la nutrición que necesitan, de modo que tengan la energía para aprender, crecer y desarrollarse como otros niños de su edad.
La comunidad no tiene una conciencia adecuada acerca de la nutrición, pero unicef y Community Health Workers como Senait Woldegebreil, un refugiado que trabaja como voluntario y va de puerta en puerta, están educando a las nuevas madres sobre la importancia de la nutrición, los signos de la desnutrición y las prácticas de alimentación adecuadas.
“Mi abuela, que me ayudó a crecer a pesar de que no tenía nada, hizo todo lo posible para enviarme a la escuela y para que yo llegara aquí. No he podido apoyarla en absoluto y la dejé sola en Eritrea ", dijo Simon 16, quien llegó a Etiopía como un menor no acompañado en busca de asilo cuando tenía 14 años. Nunca conoció a sus padres. Los refugiados de Eritrea son uno de los grupos más grandes de refugiados en Etiopía, con más de 2,400 que son menores no acompañados. Simón hizo el viaje solo y tuvo que dormir en la frontera esa noche. Luego, se quedó en el centro de registro durante 2 meses antes de que lo trasladaran al campo de refugiados de Hitsats ... lleva 2 años y 3 meses, y "la vida es muy buena en comparación con la que estaba", me dijo. . No podía imaginar cómo era antes. Hoy, está prosperando y aprendiendo, en el proceso de obtener el papeleo de su condición de refugiado (que solo puede obtener después de los 16 años de retraso), con planes para ir a la universidad y la esperanza de cambiar su vida para poder apoyar a su abuela. Así que ella lo apoyó tan desinteresadamente. Además de esto, tiene un talento increíble, es el capitán del equipo de fútbol, un bailarín y un corredor. Quién sabe a dónde podría llevarle su futuro con un poco de ayuda.
"... pero el café etíope 🥰️🥰 #LoEsTodo" - @PriyankaChopra
DÍA 4
Después de haber estado en otros campamentos de refugiados en todo el mundo, la tensión entre las comunidades de acogida (locales) y las comunidades de refugiados es evidente... todo porque los recursos básicos están divididos. Pero en muchas partes de Etiopía, ese no es el caso, y específicamente en la región de Tigray, estas dos comunidades viven lado a lado. Lo que es aún más notable, IMO ... estos niños ni siquiera se dan cuenta de lo que significa unirse (el equipo de Etiopía y el equipo de Eritrea) para jugar un juego simple de fútbol, y cómo algo tan básico puede impartir un cambio positivo. Los seres humanos, dejando de lado sus diferencias y uniéndose ... es la Humanidad. El gobierno de Etiopía también se ha comprometido a integrar las escuelas secundarias, donde los refugiados y los locales aprenden juntos. También han emitido certificados de nacimiento para los niños refugiados nacidos en Etiopía, lo que les otorga derechos que de otra manera no tendrían, como recibir una educación y tener un mejor acceso a los servicios.
Con un hospital especializado en toda la región de Tigray, se atienden a 90.000 refugiados, la atención médica es escasa. Los médicos no tienen títulos médicos avanzados. El olor a orina y la vista de los bebés recién nacidos que yacen en la UCIN sin los recursos más básicos me perseguirán.
Gracias a mi increíble familia de Unicef Ethiopia. Estoy asombrada por sus incansables esfuerzos y su inquebrantable compromiso para mejorar las vidas de los niños en todo el mundo. ¡Ustedes son mis verdaderos héroes! ¡Sigan cambiando vidas, saben que son muy apreciados! Gracias por un viaje inspirador y recuerdos que durarán toda mi vida.
Para poder ayudar y ser parte de la campaña ingresa a https://www.unicef.org/
